Brasil ya es la sexta potencia económica.
La celebración del mundial produjo una inversión en infraestructura de 16,5 billones de dólares. Ya se sabe que el 97% de las entradas las compraron los brasileños y el 3% los extranjeros, esto significa que habrá 600.000 turistas internacionales. Este mundial generará 330 mil empleos permanentes y 380 mil temporales.
Las selecciones se repartirán 20 millones de dólares.
Esto generó manifestaciones que prefieren invertir en mejores servicios sanitarios y reducidas tarifas de transportes.